Tras nuestro trabajo de investigación y conservación, cerramos el ciclo de las semillas volviendo a sembrar estas variedades, para que sigan a nuestro lado, seleccionándolas de manera tradicional las variedades y sus características específicas, como lo han hecho los y las baserritarras durante generaciones. Para ello, colaboramos con nuestros guardianes y baserritarras cercanos para mantener todas las variedades vivas.
En el espacio de Basaldea, tenemos un vivero de árboles en el que realizamos la multiplicación de variedades de la asociación. A finales de año, realizamos un reparto anual, para que los guardianes de frutales puedan llevarse a casa un tesoro de la biodiversidad cultivada que queda en Euskal Herria y poder así colaborar en la conservación de estas variedades.